Pamplona - Feb 2024
La vulvodinia es una afección prevalente caracterizada por dolor vulvar persistente, descrito como agudo, ardiente y “como un cuchillo” (Andres et al., 2016).
Las estimaciones basadas en la población indican que la prevalencia de la vulvodinia a lo largo de la vida oscila entre el 10% y el 28% (Harlow & Stewart, 2003). Los costos directos e indirectos de la vulvodinia en Estados Unidos se estiman entre 31 y 72 mil millones de dólares anuales (Xie et al., 2012).
A pesar de su prevalencia, carga económica e impacto personal, la etiología de la vulvodinia sigue siendo desconocida y se considera multifactorial (Bornstein et al., 2016). Esto sugiere que la condición es el resultado de diversos factores biopsicosociales.
Claramente, la constelación de factores que caracterizan a la vulvodinia sugiere que existen vías etiológicas biopsicosociales involucradas en el desarrollo y persistencia de esta condición.
En Clínica Pelvia, comprendemos que el tratamiento de la vulvodinia requiere un enfoque integral. Al trabajar desde la confianza, la exposición gradual y el respeto por los límites del cuerpo, ayudamos a las personas a aliviar el dolor y mejorar su calidad de vida. Conoce más en nuestra sección de tratamientos para el dolor pélvico crónico.
La salud del suelo pélvico tiene un papel crucial en condiciones como la vulvodinia. Un suelo pélvico fuerte y bien cuidado puede marcar la diferencia en la prevención y tratamiento de este dolor crónico. Descubre cómo mantener y fortalecer esta área en nuestro artículo sobre las funciones del suelo pélvico.
La incontinencia urinaria puede agravar problemas de dolor pélvico crónico y vulvodinia. En Pelvia ofrecemos tratamientos personalizados que abordan estos problemas, ayudando a mejorar el bienestar general. Visita nuestra página sobre tratamientos para incontinencia urinaria.
El período postparto es fundamental para la recuperación del suelo pélvico y puede ayudar a prevenir problemas como la vulvodinia. En Clínica Pelvia, contamos con programas específicos de recuperación postparto para fortalecer esta zona y brindar cuidados integrales. Consulta nuestra sección de recuperación postparto.
Es importante distinguir si se trata de una vulvodinia primaria o secundaria. Esto se define según si los síntomas han estado presentes desde siempre o si surgieron a raíz de un evento concreto, lo que facilita un tratamiento más adecuado y satisfactorio.
A nivel de fisioterapia, trabajamos desde la confianza y la exposición gradual, respetando los límites del cuerpo. El tejido tiene memoria y responde a la seguridad o inseguridad percibida. La exposición controlada a estímulos puede ayudar a crear una relación de confianza con la zona afectada.
Existen diferentes tipos de ejercicios para abordar la despersonalización y mejorar la propriocepción:
Si te sientes identificada o deseas probar alguno de estos tratamientos, no dudes en ponerte en contacto con nosotras. La vulvodinia es un dolor real y existe solución. No te resignes a vivir con ello. Cuídate.
Post de: Nerea Argüelles. Fisioterapeuta. Equipo Pelvia